Un Final Inesperado

El 6 de mayo de 1937 siendo las 19:25 y después de varias horas de tormenta eléctrica en la ciudad de New Jersey, ante la oscuridad de la noche el cielo es iluminado por uno de los desastres más grandes referente a dirigibles que se hubiera presenciado, acabando con la confianza de este medio de transporte y limitando la grandeza del poderío alemán.

Su destino estaba escrito y diferentes señales fueron ignoradas desbocando en el trágico final. Tras su salida de la ciudad de Fráncfort, el Hindenburg se vio enfrentado a fuertes vientos que retrasaron su avance y continuaron ignorando el poder climático.

La mañana del 6 de mayo y ya con retraso en su viaje se decidió sobrevolar Manhattan causando conmoción por su grandeza y magnitud, el espectáculo era maravilloso. Después de que el clima calmó su ira, la dirección del Hindenburg se embarcó hacia la base militar de Lakehurst, el ego alemán no permitía sospechar alguna falla o algún problema.

Ya estando más de medio día retrasados para su llegada y tratando de evadir los cambios climáticos, el Hindenburg vio su destino tan cerca que sus tripulantes abrieron las ventanas para regocijarse de su victoriosa llegada y saludar con desdén a quienes los esperaban en tierra.

Las maniobras de aterrizaje eran de por si complejas sin necesidad de un clima tenebroso, las sogas tocaron el suelo y los tripulantes en tierra se apegaban a ellas con tal fuerza que evitaban ser llevados hacia el cielo y salir lesionados.

De un momento a otro las sonrisas de victoria y regocijo fueron apagadas, aquellas llamas devoraron el dirigible como un león a su presa y los gritos de desesperación suplicaban ayuda o simplemente aceptaban su destino. La imaginación no llega tan alto para saber o tan siquiera pensar cuales son las ideas en ese momento, pero ya la tragedia estaba concluida, en menos de un minuto la vida encontró su final para treinta y seis personas y quedaron en la memoria de miles más a los que llegó la historia final.

El despertar después de la tragedia solo deja preguntas, desde un macabro final en la historia del destino, hasta maliciosos planes de terrorismo en contra del poder nazi; sin embargo, es poco probable encontrar respuestas en las cenizas que dejó un final inesperado.

Momento del desastre Hindenburg